viernes, 12 de agosto de 2011

DNI - una buena

El miércoles 3 de este mes fui a una oficina del Registro Nacional de las Personas y gestioné mi nuevo pasaporte. Para obtenerlo, debí también renovar mi querido, original y ya veterano documento nacional de identidad (DNI) que pese a sus 37 años sigue en buena forma, en buen estado.

Dos horas (y 89.695.642.395.723.450 rostros del gobernador Daniel Scioli en la publicidad que repetían hasta el hartazgo toooooooodos los televisores de la oficina) después, seguí mi camino con el trámite iniciado.

“En una semana debería llegarle el DNI y en unas tres el pasaporte”, predijo la simpática empleada que se encargó del eslabón final del trámite.

Y, justo es reconocerlo, así fue.

Ayer me llegó el nuevo DNI, el celeste, a casa. Sin error alguno. Todo en orden. Como debe ser. Ergo, reconocimiento y felicitaciones al Gobierno porque el programa de confección y distribución de documentos funciona.

¿Lo malo dentro de lo bueno? La innecesaria alusión al “Cdor. Florencio Randazzo, Ministro del Interior”, en ambas caras del sobre en que llegó el documento [foto, arriba, tomada con mi telefonito celular].

El DNI es la encarnación física del derecho inalienable de cada individuo a su identidad, lo que conlleva a su vez el deber irrenunciable del Estado de garantizarlo.

Con su presencia en el sobre, sin embargo, Randazzo (que también estampa su firma en la nueva cédula federal que recibí) parece asemejarlo a una graciosa concesión de su voluntad y enloda, así, un verdadero logro del Gobierno.

pd: veremos si cumplen también con el nuevo pasaporte. Si sí, pues chapó.

4 comentarios:

  1. Pero tal vez el mismo Florencio se ocupó de ponerlo en el sobre e ir hasta el correo; por eso está en el remitente...

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  2. Ojo: más allá de tu ironía, sí puede ser que el ministro Randazzo se haya puesto el Proyecto DNI al hombro y que sea mérito excluyente suyo que funcione bien. Pero eso no obsta a que de todos modos me resulte innecesaria la inclusión de su nombre en ambas caras del sobre (más allá de también en la cédula, donde en la anterior figuró un subcomisario).

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  3. Che Alconada....de todas tus investigaciones truchas alguna termino en la justicia? jajajajajajajaa mirá que sos alcahuete

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  4. La verdad es que no conté jamás cuantas investigaciones o artículos míos terminaron en la Justicia, siendo aportadas como pruebas o abriendo nuevos expedientes. Pero deben superar la veintena. Entre otras, algunas que se incorporaron al enriquecimiento ilícito de Carlos Menem (cuentas en Suiza); las coimas en el Senado (pruebas sobre la ruta del dinero); diplomacia paralela con los Kirchner, el Proyecto Siemens-DNI (Menem, De la Rúa, Duhalde y los Kirchner), el caso Antonini, la Unidad de Información Financiera (UIF) y unas cuantas más, pero esas son las primeras que me vienen a la mente.
    Sin embargo, hay una pequeña confusión en su comentario. Mi trabajo es buscar información, verificarla y publicarla. Si luego eso genera una investigación (judicial y/o parlamentaria) es un efecto de mi trabajo, pero no el objetivo último, que es que los lectores sepan qué ocurrió (por ejemplo, que Menem sí tiene cuentas en Suiza, que sí hubo coimas a senadores o que Antonini estuvo en la Casa Rosada, lo que el Gobierno desmintió durante un año).
    Por último, un pequeño gran detalle: yo asumo las consecuencias de mis actos y firmo cada artículo, como así también cada post que escribo en este blog. A diferencia de usted, que se esconde en el anonimato para ironizar. Pura cobardía.

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