viernes, 30 de abril de 2010

"Que se deje de joder"

A lo largo de tres carillas, el texto del cable titulado "Grave situación" de la embajada argentina en Venezuela (CA EVENE 020096/2005) es contundente. Queda claro desde su encabezado: "Muy urgente"; "confidencial"; "requiere acción". Y por las palabras utilizadas como "descriptoras" de su contenido: "Venezuela", "exportaciones", "comercio", "petróleo".

Con ese cable en sus manos, el entonces canciller Rafael Bielsa encaró al presidente Néstor Kirchner y le reclamó por lo que sentía que era una "diplomacia paralela" armada desde Buenos Aires para Venezuela y, en particular, para los negocios con la revolución bolivariana.


Rafael Bielsa, en sus tiempos de canciller argentino

Bielsa logró despegarse del problema que se avecinaba, y debió dejar en manos de otros (es decir el ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, y su segundo para el OCCOVI, Claudio Uberti), la relación bilateral con la Venezuela de Hugo Chávez.

Sin embargo, cuando Uberti se enteró del cable -que también incluyó varios ejemplos de problemas padecidos por empresarios argentinos, y en el que se lo citaba por su apellido en uno de esos traspiés junto a la palabra "corrupción", la reacción del "señor de los peajes" fue contundente.

"Decile a Sadous que se deje de joder", le comunicó Uberti al segundo de la embajada, Alberto Alvarez Tufillo, para que le dejara claro al embajador Eduardo Sadous quién mandaba en Caracas cuando de relaciones comerciales se trataba. Y así fue, hasta que Uberti voló por los aires con la irrupción del "escándalo de la valija".

pd: la nota completa, acá.

miércoles, 28 de abril de 2010

La embajada paralela

Corría 2007 y ya todos aquellos que querían cerrar algún negocio entre la Argentina y Venezuela sabían que debían pasar por la embajada, aunque no por la Embajada.

Parece una contradicción, pero no lo es.

Los negocios registraban una comisión de entre el 10 y 20 por ciento (según debieran pagar a funcionarios argentinos o venezolanos, o a ambos grupos), y debían gestionarse a través de la "embajada paralela" que montaron funcionarios kirchneristas en Caracas, por fuera de la Embajada oficial liderada por Eduardo Sadous y, luego, por Alicia Castro.

Casualidad o no, quien por aquella época cobró notoriedad en la relación bilateral fue Claudio Uberti, que muy lejos de su función oficial de contralor de las concesiones viales desde el OCCOVI, se la pasó volando entre Caracas y Buenos Aires.


Recuerda Daniel Santoro: "Claudio Uberti y otros funcionarios del Ministerio de Planificación viajaban dos veces por mes y se alojaban en el lujoso hotel Meliá, el preferido del chavismo pero ubicado ahora en un barrio en decadencia. No sólo en taxis aéreos, sino también "en aviones de PDVSA y hasta en uno de la Armada argentina".

Esto, claro está, hasta que ocurrió el decomiso de aquella peculiar valija con US$ 800.000 que le aportó fama mundial a Uberti, a Alejandro Antonini y al llamado "maletinazo"...

pd1: el texto completo de Santoro, acá.

pd2: en otro recuadro, Santoro comenta que, para él, la valija del escándalo era el "vuelto" de un negocio bilateral y no, como siempre se dijo, dinero de Hugo Chávez para las elecciones. Coincido con él. Para mí (valga la repetición pa' quienes leen este blog), esa maleta fue parte del "clearing aéreo" de las coimas bilaterales.

lunes, 26 de abril de 2010

En el corazón histórico de Lavado-land

Y sí, como no podía ser de otra manera, estoy acá:


Es decir, en el corazón histórico del lavado de activos. Porque ahora hay otras plazas más modernas o más fashion, pero Suiza tiene esa cosilla de la lavandería tradicional que no se reemplaza con nada...

Viajé el jueves para asistir a un congreso de periodismo de investigación y asistir a la ceremonia de entrega de premios Daniel Pearl del International Consortium of Investigative Journalists (ICIJ).

No, no gané (quedé finalista, con mención, diploma y US$).

Sí, sí me puse a dar algunas vueltecillas (y buscar información).

Aunque resulta peculiar hurgar en estos asuntos, cuando siento que hasta las señales visuales son tan elocuentes...



pd: je, je, je... no se enojen, amigos suizos... ¡Basta con que asuman las consecuencias de sus actos!

domingo, 25 de abril de 2010

¿Estallido o sistema?

Dice Francisco "Pancho" Olivera, en su muy buen artículo que publicó hoy el diario LA NACION.

"Venezuela es la tierra de los intermediarios y, en realidad, poco es ya lo que sorprende en el mundo de los negocios. 'Un 10 o un 12 por ciento', reconoció un exportador de porotos argentino cuando se le preguntó cuánto había que pagarles a los integrantes de este semillero de famosos, muchos de ellos ya protagonistas estelares de la historia latinoamericana reciente: Carlos Kauffmann, Frankin Durán, Guido Antonini Wilson, Alex del Nogal, Rafael Sarría o Luis Benshimol. 'Primero te piden eso', agregó, 'pero después aparecen los gremios de la grúa, que te exigen otro 1,5 por ciento, y los que te facilitan el trámite para que no pagues tanta estada con la carga, que reclaman otro 1,5 por ciento'".



Para Pancho, y dado el indudable impacto que generó el testimonio judicial del ex embajador Eduardo Sadous sobre la "embajada paralela" de la Argentina en Venezuela que operaba Claudio Uberti, "estalló la bomba bolivariana".

Yo, lamento disentir, intuyo que no será así. Creo que este será un escándalo más que luego se disipará ante la incapacidad (o desinterés) de la Justicia (tanto en Buenos Aires como en Caracas) por investigar.

Adhiero, más bien, a la visión que expresa muy bien J.M.Simonetti. La teoría clásica veía a la corrupción como la "transgresión" al sistema, como su "acto desviado". Pero en ciertos países "estos fenómenos criminales se vuelven parte fundamental de las economías nacionales". Son el principio, no la excepción.

Así es en Venezuela y, pa' dejarlo clarito, en la Argentina.

sábado, 24 de abril de 2010

Ventilador marca Sadous

Me enteré el jueves al mediodía, por el llamado de un colega.

Llamé a otro colega, para avisarle, pero ya estaba al tanto y en plena búsqueda de más información.

¿De qué hablo?

De esto:

"Eduardo Sadous, que fue embajador argentino en Caracas, declaró bajo juramento, ante la Justicia, que los empresarios que querían hacer negocios con Venezuela en el inicio del kirchnerismo debían pagar entre un 15 y un 20% de coimas a funcionarios del Ministerio de Planificación".

Aquellos dorados tiempos. El embajador Sadous cuando fue condecorado por autoridades venezolanas.

Y sigue: "Mencionó que miembros del Gobierno se habrían beneficiado con testaferros en esos negocios de exportación y que la relación comercial con el país caribeño la manejaba, en forma paralela a la Cancillería, el entonces director del Organo de Control de Concesiones Viales (Occovi), Claudio Uberti"

Quien leyó el libro o este blog, sabe de qué hablamos. Pero, ¿por qué recién ahora posteo la noticia que apareció ayer en los diarios?

Pues porque me encuentro en otro país, de otro continente. En el corazón histórico del imperio del mal (o al menos de su forma lavada).

Habrá más precisiones para este boletín... pronto.

pd: más datos sobre el embajador/ventilador Sadous, acá y acá.

viernes, 23 de abril de 2010

Rafa, el coordinador

Rafael Follonier no es un funcionario público cualquiera. Tanto por su pasado (miembro de la guerrilla ERP, exiliado político durante la dictadura), como por su presente (coordinador de Asuntos Técnicos de la Unidad Presidencia). Y, como no podía ser de otro modo, su nombre rondó el "caso Antonini".


De izquierda a derecha (los que conozco): embajadora argentina en Caracas, Alicia Castro, titular de PDVSA, Rafael Ramírez, presidente Hugo Chávez, Rafael Follonier (bigotes blancos, al fondo), ministra de Defensa, Nilda Garré, ministro Julio de Vido, "valijagate" Claudio Uberti, canciller Alí Rodríguez. De pie, con remera, algunos creyeron ver al agente Canchica Gómez que se reunió con Antonini en Fort Lauderdale.

Dice el autor de esta crónica reciente: "Pero los lazos con Venezuela también le trajeron problemas a Follonier no bien estalló el escándalo de la valija con 800.000 dólares de Antonini Wilson. En las grabaciones del FBI y en documentos judiciales surgían diálogos entre funcionarios chavistas y kirchneristas involucrados donde se nombró a un enviado de la Casa Rosada que ocupaba el cargo de viceministro de Asuntos Judiciales. Como ese puesto no existe, pero Follonier tenía fuertes lazos con Chávez y ocupaba el cargo de viceministro del Interior, automática se lo relacionó con el caso. Nunca pudo corroborarse este nexo".

Consultado por el cronista, Follonier (amigo desde los '70s del entonces también exiliado Alí Rodríguez, luego presidente de la petrolera PDVSA y canciller de Hugo Chávez) reiteró la línea defensiva que mantuvo desde que lo pegotearon por primera vez con el escándalo: "No tengo nada que ver con Antonini. Detesto ese tipo de personajes. Mi relación con Chávez sólo es política y nunca mezclé los negocios", aclaró.

pd: el artículo completo, acá.

miércoles, 21 de abril de 2010

1001

Y hablando de fechas singulares...

Hoy se cumplen 1001 días de impunidad en el "caso del maletín".


Síp. Dos años, 8 meses y 15 días sin que la Justicia argentina (o su par venezolana) hayan precisado qué ocurrió y quienes son sus responsables penales.

Es decir, nada que deba sorprendernos demasiado.

martes, 20 de abril de 2010

Maletín, valija & caja

Por estos días se cumplen DIEZ años (sí, 10 años) del escándalo por las coimas en el Senado. Aquellas que facilitaron la aprobación de la ley de "flexibilidad" laboral y que encarnaron el principio del fin para el gobierno de Fernando de la Rúa.

Breve síntesis:

- febrero de 2000: comienza a hablarse de la "Banelco" para destrabar votos de senadores.

- 30/marzo: se reúne De la Rúa con un par de ministros y senadores clave en la Casa Rosada.

- 11 y 13/abril: se cobran dos cheques en el Banco de la Nación Argentina.

- 18/abril: se retira el $$$$ de la sede de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) para efectivizar el pago.

¿Por qué recuerdo este caso en este blog? Por lo que relató el otrora secretario parlamentario, Mario Pontaquarto, cuando confesó ante la Justicia cómo concretó el reparto de los sobornos:


"[...] Me retiré junto al maletín, la valija y la caja y me dirigí al departamento de Cantarero. El me había manifestado que lo tenia que llamar cinco minutos antes para abrir el portón del edifico. Así ocurrió: llamé para decirle que estaba llegando. Cuando llegué había un señor que estaba en la puerta porque sabía en qué auto iba a venir e ingrese el auto al garaje. Este señor que estaba ahí se retiró y me estaba esperando Cantarero. Me recibió en la playa de estacionamiento del edifico; estaba de sport, bajamos la maleta, la valija y la caja del auto y recuerdo no haber ido por ascensor. Fuimos por la escalera de servicio, ingresé al departamento, él se encontraba solo, me puso frente a una mesa ratona, pero un poco más alta, con base de vidrio. Me hizo sacar el dinero del maletín, la valija y la caja y ponerlo sobre esa mesa. El dinero estaba envuelto como si fuera cerrado al vacío. Que si bien estaban en fajos de diez mil cada una de esas planchas, contenían cien mil pesos. Yo sabia que tenia que hacer entrega de cuatro millones trescientos mil pesos. No se abrieron esos fajos cerrados al vacío; se contaban por fajo de diez mil. El cuenta eso con el control mío adelante, me dice que está correcto; yo estaba muy nervioso, recuerdo, me quería ir lo más pronto posible y cuando yo estaba por salir, el me alcanza un papel que me dice “Ponta”, como me llamaba él; ´esto es para tu control´. Yo sinceramente nunca había participado, en mis veinte años adentro del Senado, de una situación de estas características".

Eso sí, 10 años después, y pese a las pruebas (y hasta la irrupción del "arrepentido" Pontaquarto), no hay una sola condena. Sólo un juicio oral aún en el horizonte.

pd: la declaración completa de Pontaquarto, acá.

lunes, 19 de abril de 2010

Retorno a las pistas

El venezolano Carlos Eduardo "Demonio" Kauffmann volvió a las andadas. Aunque, claro, acotado ahora a un solo país: Estados Unidos, donde recuperó su libertad en enero de 2009 tras pasar un año y tres meses en prisión.

El empresario, que negoció una reducción de su pena con el FBI a cambio de confesar el plan del gobierno de Hugo Chávez para acallar a Alejandro Antonini a cambio de US$ 2 millones y abogados gratis, continúa bajo “libertad vigilada” hasta 2011. Pero al menos se da el gusto de subirse otra vez a su amado Porsche 911 y compite con el número 24 en las carreras de Patron GT3.


Al parecer, a Kauffmann no le va mal en su retorno a las pistas: el 22 de marzo, en Sebring, Florida, logró el récord del circuito, a más de 160 kilómetros por hora.

Lo que se dice un muchacho rápido.

pd1: para la información oficial sobre la competición, acá y acá. Y una muy extraña nota publicada en "Noticias de Cojedes" (porque cuentan lo ocurrido, pero no informan que se trata de Kauffmann), acá.

pd2: gracias al informante. Peculiar. Pero, al fin de cuentas, informante.

viernes, 16 de abril de 2010

Mira quién habla

O escribe, en este caso, tras el encuentro entre Cristina Fernández de Kirchner y Barack Obama:

"No se trataba, ni se trata, de pedir permisos o efectuar alineamientos automáticos. Se trata de tener las mejores relaciones internacionales sobre valores y sin olvidar el racional despliegue de nuestros intereses. Por eso fue incorrecto e innecesario el conflicto generado en ocasión del affaire de las valijas con dólares. Confundir la utilización que un grupo anti Chávez hizo de un hecho corrupto, del que formaron parte algunos funcionarios de nuestro país, con una confabulación de EE.UU. contra el Gobierno, fue un grave error de apreciación y de política que desgastó la relación y afectó intereses nacionales. No fue el único ni el último caso, pero es emblemático".

Datos notables varios:

1. El autor del comentario: José Octavio "Pilo" Bordón, ex embajador ante Estados Unidos durante toda la presidencia de Néstor Kirchner. Es decir, cuando estalló el escándalo Antonini.

2. Habla de un affaire en plural: "valijas". No "valija". Es decir, convalidando que hubo más dinero que pasó de largo.

3. Habla de "hecho corrupto", con lo que evita meterse en el debate sobre si el dinero fue o no a la campaña electoral de Cristina Fernández de Kirchner. Pero deja claro que hubo algo más que un venezolano pirata, como el Gobierno argentino sostiene desde siempre.

4. Habla de "funcionarios corruptos". Otra vez el plural. Aún cuando el Gobierno argentino sólo echó a un único funcionario, Claudio Uberti. Y lo echó, en teoría, porque dejó subir a Antonini al avión.

5. Adscribe a la visión de un "grupo anti-Chávez" que potenció el escándalo, en línea con quienes creen que su resonancia pública se debió, al menos en parte, a los intereses de críticos del presidente venezolano en Miami, Venezuela y la Argentina. Pero también critica al Gobierno por su "grave error de apreciación y de política"

Conclusión: si ya no lo habían hecho, y solo por esta columna, a Bordón acaban de declararlo persona non-grata en la Casa Rosada...

pd: para leer la columna completa, acá.

miércoles, 14 de abril de 2010

Marche una valija

La noticia: Allanamiento en uno de los tantos inmuebles vinculados al ex secretario de Transporte kirchnerista, Ricardo "Kiwi" Jaime, el hombre que además tiene lazos probados con un Lear Jet, un yate, un spa, tres o cuatro casas en un country, dos departamentos en Buenos Aires, otro en Córdoba, otro en Santa Cruz, varios autos, una posada en Brasil, una moto BMW, una radio y sigue la lista...


El hallazgo: durante el allanamiento encontraron 40.000 dólares, 50.000 pesos, 10.000 euros y 600 reales. Es decir, unos 260.000 pesos aproximadamente. En otras palabras, más que todo el patrimonio que el propio Jaime declaró que tenía cuando se marchó de la función pública.

La pregunta: ¿De dónde salió ese dinero? ¿Siempre lo tuvo y lo ocultó (¿evasión tributaria?)? ¿Lo obtuvo mientras ejerció la función pública (¿dádivas? ¿sobresueldos?)? ¿Acaso es producto del pago de sobornos? Y si lo fue, ¿cómo se concretó? ¿Valijita, maletín o bolso?

Eso sí, Jaime le reclamó a la Justicia que le devuelvan el dinero.

pd: ¿Por qué en Córdoba le dicen "Kiwi" a Jaime? Por que le gustan los verdes, tiene algo de pelo y está lleno de propiedades...

lunes, 12 de abril de 2010

De vigas y pajas

El "caso Antonini" no para de aportar sorpresas.

Una de las últimas novedades es lo que publicó el diario para-oficial "El Argentino", al parecer levantando lo que publicó otro medio para-oficial, "Buenos Aires Económico".

En su afán por defenestrar al juez federal de la jurisdicción de Nueva York, Thomas Griesa, por embargar reservas del Banco Central argentino (BCRA), los redactores para-K admitieron la veracidad de lo ocurrido con aquella maldita valija del 4 de agosto de 2007.


¿Cómo es posible?

Pues es simple: con tal de sacudir al juez Griesa -lo que se refleja desde el título mismo de la columna, "La paja del juez ajeno"-, los escribas del texto juguetearon con aquello de la "paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio".

Para lograrlo, invirtieron -"viga en el ojo ajeno; la paja en el propio"-, y criticaron la decisión del magistrado estadounidense. Pero al entrar en ese terreno -y como dirían los abogados, por aplicación del contrariu sensu-, admitieron que, por lo menos, el "caso Antonini" es una paja -o "viga"- en el ojo propio.

En fin, que para complicarse solos...

pd: el texto completo, acá.

viernes, 9 de abril de 2010

¿Maleta o cueva?

Cada opción implica su riesgo.

- Maleta: A favor: la comodidad de llevar el dinero a todos lados, sin depender de nadie, ni contarle a nadie, ni dejar rastros contables en ningún lado. Sólo es cuestión de esconder el dinero (en una caja de seguridad, en una caja fuerte, abajo del colchón, en el jardín....). En contra: donde te agarran, te agarran con todos los dedos pegados... y encima de las rupias. Ejemplos sobran: Uberti/Antonini, Mario Caserta (Yomagate), Amado Carrillo Funes (Cartel de Juárez), Coimas en el Senado (Mario Pontaquarto), los jamones de Ivisa/Casino, etc.

- Transferencia: A favor: el dinero circula por circuitos negros (y luego blancos) con la ventaja de disponer de los fondos en cualquier lugar por medio de tarjetas de débito y crédito. En contra: un circuito es un circuito. Aunque, claro, el banco que se mete en este baile, más que banco es una cueva. Y una cueva es una cueva. Y donde alguien tira de la piola, se pudre todo. Ejemplos sobran: escándalo UBS (EEUU), escándalo LGT Bank (Liechtenstein), cueva del BNP Paribas (Argentina) y... Hernán Arbizu.

El buen muchacho trabajó para unos cuantos bancos (Citibank, BankBoston, UBS/Unión de Bancos Suizos), hasta que llegó a JPMorgan. Durante años abrió cuentas para argentinos en el exterior sin preguntar (obvio) de dónde salía el dinero. Aparecen unos cuantos del Who is Who local.

El pequeño problema es que Arbizu comenzó a toquetear el dinero de algunas cuentas para inflar los intereses percibidos por otros clientes. Hasta que se armó una bola de nieve. Sólo fue cuestión de tiempo para que alguien se diera cuenta. Y cuando ocurrió, fue cuesta abajo en la rodada. Con pistola en la cabeza, según cuenta él, incluida.

Ahora, Arbizu procura evitar que lo extraditen a EEUU, donde la denuncia de JPMorgan podría llevarlo 30 años tras las rejas salvo que negocie colaborar con los fiscales. Por eso, eligió dónde quiere perder, Argentina, y pateó el tablero. Claro está, un tablero repleto de apellidos sensibles, poder y dinero negro. Montañas de billetes.

Todo esto me lleva al dilema obvio: ¿maleta o cueva?

pd: para más información sobre sus problemas en EEUU, acá; sobre su relato, acá; y su lista de clientes, acá.

miércoles, 7 de abril de 2010

I'm a loser baby, so...

Loser, de Beck:

Soy un perdedor
I'm a loser baby, so why don't you kill me?
(know what I'm sayin'?)

Gran tema para resumir este caso, como lo hizo un estudiante de la Universidad Austral.



Hay un par de frases del presidente venezolano...

lunes, 5 de abril de 2010

Il Gatopardo

Una de las características notables del gobierno de Hugo Chávez es su tendencia a cambiar de puestos a sus funcionarios, que al cabo de unos pocos años pasan por distintos ministerios y agencias.

Otra característica similar de la gestión chavista es su afición por rebautizar las oficinas públicas. Así es como, por ejemplo, creó nuevos ministerios, pero también le añadió eso del "poder popular" a todos los ya existentes, como el "Ministerio del Poder Popular del Despacho de la Presidencia".

Entre los últimos bautismos (dic '09) aparece la ahora ex Dirección de los Servicios de Inteligencia y Prevención (Disip). Es decir, la policía política del gobierno bolivariano, lo que no equivale a policía "secreta" pues de eso tiene poco y nada, ya que protagonizan operativos, detienen personas y mucho más a plena luz del día y, para peor, con mucho ruido.


La Disip, mientras la dirigió el general Henry Rangel Silva, se involucró de lleno en el "caso Antonini". Sus muchachos eran los encagados de acallar a Guido Alejandro Antonini Wilson con US$ 2 millones, más abogados en Venezuela y Argentina. Pero como suele ocurrir, si algo puede salir mal, SALDRÁ MAL.

La cuestión es que Chávez decidió apostar al "nombre nuevo, vida nueva", aunque no sea tal. Cambiar algo para que nada, en el fondo, cambie. Por eso la Disip es ahora el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin).

Dato positivo: al menos no le puso "Servicio Bolivariano del Poder Popular de Inteligencia Nacional". La sigla hubiera sido complicada de leer: Sebppin o Seboppin o Sebopopin. Complicado. Y, claro, tan ineficaz como la vieja Disip. Aquella que envió a un agente a Estados Unidos para verificar si Antonini era confiable y ese agente (Antonio José Canchica Gómez):

1. No se dio cuenta que lo siguieron.

2. No se dio cuenta que lo filmaron.

3. Usó su tarjeta de crédito, con su verdadero nombre (!), para comprar un souvernir.

Eficacia del Poder Popular Bolivariano, que le dicen.

viernes, 2 de abril de 2010

Una historia que se repite...

Y sí... tampoco vamos a creer que ellos iban a ser los únicos, ni tampoco los últimos...

Dice el cable de noticias:

"Herman Solórzano, un residente de Miami de 58 años de edad y su hijo ingresaban de contrabando regularmente 100.000 dólares por vez en maletas en aviones de Puerto Rico a Miami. El dinero fue depositado entonces en bancos o transferido a otras personas".

Cualquier semejanza con el caso Antonini es mera coincidencia...

pd: más información, acá y acá.